Este día, el mundo del rock pierde a uno de sus íconos más grandes. Ozzy Osbourne, el inolvidable "Príncipe de las Tinieblas", falleció a los 75 años, dejando tras de sí un legado inmenso en la historia del heavy metal.
Con una vida marcada por la música, la rebeldía y una autenticidad inquebrantable, Ozzy fue mucho más que el vocalista de Black Sabbath. Fue un símbolo de resistencia, un artista que nunca dejó de luchar a pesar de los problemas de salud, adicciones y caídas personales.
Un artista que cambió la historia del rock
Nacido en Birmingham, Inglaterra, John Michael Osbourne su nombre real saltó a la fama a finales de los años 60 con Black Sabbath, banda pionera del heavy metal. Temas como Paranoid, Iron Man y War Pigs marcaron a generaciones enteras, consolidando su lugar en la historia de la música.
Tras dejar la banda, su carrera en solitario fue igual de poderosa. Discos como Blizzard of Ozz y Diary of a Madman lo convirtieron en leyenda.
Siempre auténtico, siempre Ozzy
Ozzy no solo fue músico. También se volvió una figura mediática gracias a su famoso reality show The Osbournes, donde mostró una faceta más humana, caótica y entrañable. Su personalidad única lo convirtió en un ícono cultural que trascendió géneros y generaciones.
A pesar de sus luchas con el Parkinson y otros problemas de salud, Ozzy nunca se alejó del todo del escenario. Su espíritu de lucha, su amor por la música y el cariño de sus fans lo mantuvieron firme hasta el final.
El adiós a un ídolo
Hoy, millones de fanáticos en todo el mundo despiden a Ozzy Osbourne con tristeza, pero también con gratitud. Se va un pionero, un rebelde, un músico inmortal. Su música seguirá viva, sonando fuerte, como siempre lo hizo él.
You cant kill rock and roll, its here to stay Ozzy Osbourne
