El sujeto que intentó traficar con estos animalitos los envolvió en calcetines, los ejemplares tenían un valor de un millón de dólares.
Wei Qiang Lin, un residente de Brooklyn, Nueva York, admitió su culpabilidad cuando intentaba enviar de contrabando de tortugas protegidas, con un valor estimado en más de un millón de dólares.
Su plan consistía en enviar a Hong Kong estos reptiles, escondidos en cajas que falsamente se declaraban como "juguetes de animales de plástico".
En tanto, el Departamento de Justicia de Estados Unidos denunció que el contrabandista se declaró culpable de intentar exportar más de 220 paquetes, los cuales contenían aproximadamente 850 tortugas de caja oriental y tortugas de caja de tres dedos.
Valuadas en más de 1 MDD
Las especies que intentaba traficar son altamente codiciadas en el mercado internacional de mascotas, especialmente en China y Hong Kong, donde la gran cantidad de reptiles y su alto valor monetario reflejan la gravedad del delito.
Las tortugas, valoradas en unos 1.4 millones de dólares, fueron descubiertas durante una inspección fronteriza de rutina. Los oficiales se percataron de la situación al encontrar los reptiles atados y envueltos dentro de calcetines anudados, escondidos en las cajas de envío.
El método de ocultamiento de los animales, además de ser ilegal, ponía en riesgo la vida de los animales, quienes eran transportados en condiciones deplorables.
